04 Noche

Ending: Alejandro Dolina – El bar Infierno -

   Hay más allá del infierno, otro infierno imprevisto y posterior. Durante un tiempo, el condenado se instala en el tormento, lo incorpora a sus hábitos y busca consuelo en la idea de que nada peor podrá ocurrirle. Es entonces cuando cae en otro infierno, el verdadero, cuyos sufrimientos son imposibles de comprender y de calcular. El infierno como castigo por los pecados es, al menos, razonable. Uno arde en ríos de fuego pero atesora una convicción inevitablemente dichosa: el universo tiene un propósito ético; en algún lugar están los bienaventurados; en algún lugar está Dios. El verdadero infierno es, antes que nada, injusto. Uno no sabe por qué está allí, ni cuáles son sus culpas, ni cuál es el plan que está cumpliendo.

Infiernos benignos permiten conocer el camino para evitarlos. Mucho peor es que cualquiera se salve y cualquiera se condene. Ignorar las consecuencias de los propios actos: ¡eso es el infierno! 

Audy Schreiker.

   Audy miraba de reojo como Ancel se arrojaba con violencia hacia el crinos de color blanquino que se había trasformado Pluma, por su parte Marco Antonio lucía un tanto precavido mientras miraba al imponente Orton erguirse delante de el, no pasaron más de cinco segundos cuando el crinos había iniciado el ataque. Los demás garou presenciaban el combate mientras lentamente rodeaban a los tres hijos de Caín. Audy sabía que solo había una oportunidad, oportunidad que irónicamente se la habían ofrecido dos desconocidos. Clavo su mirada en el vampiro cazador mientras Kirk tampoco se movía.

-          ¿Estás preocupado por ellos? ¡ese es tu principal problema! –Audy iniciaba el ataque mientras el joven cazador esquivaba los golpes- siempre has sido tan compasivo… tan humano… quizás es por eso que me gustas…

-          Déjate de tonterías… -Kirk sacaba de entre sus ropas una espada idéntica a la que usaba Tanairy- esta vez tiene que terminar todo…

-          Te he buscado tanto… por tanto tiempo… ¿Qué no lo puedes entender? –trataba de tomar su garganta pero Kirk evitaba el golpe cubriéndose con su espada- no cederé… -apretaba la espada usándola de apoyo y brincando por encima de el encestándole una fuerte patada en la espalda haciendo que cayera con violencia sobre el frio pavimento-

   Inmediatamente el crinos de Pluma reaccionaba pero le cortaba el paso Ancel que la tomaba del cuello arrojándola varios metros.

-          De darás de su sangre –Ancel corría hacia Pluma- beberé y beberé…

   Marco Antonio había sido abrazado por Orton que aullaba ferozmente. Era imposible liberarse no esperaba que, ese crinos fuera tan fuerte. Intentaba partirlo en dos pero no sería tan simple para un vampiro antiguo y con un buen sire como el. Golpeaba al garou en la sien aturdiéndolo solo un poco y liberándolo. De nueva cuenta Orton se arrojaba hacia el tratando de buscar su garganta para terminar de una vez con ese combate.

-          Te has sabido rodear bien J´Peur –Audy se percataba del círculo de crinos que es comenzaba a formar alrededor del- pero a mí solo me importa algo: tu. Vendrás conmigo…

-          Sabes que es imposible –se incorporaba-

-          Dime algo… ¿Qué fue de esa mujer?

-          ¡Eso es algo que no te importa! –Kirk se arrojaba contra Audy pero ninguno de sus ataques siquiera le hacía nada- es como si…

-          ¿Adivinara? –Audy sonreía y de un movimiento se colocaba detrás de el- ¿Cómo no podría saber todos tus movimientos, todos tus pensamientos? Si eres creación mía… -lamia su garganta-

-          ¡Quítate de una buena vez! –Kirk lo golpeaba en el rostro alejándose y apuntándolo con la espada-

-          Ahhhhhhhhhhh ya recuerdo… -se tocaba la mejilla mientras sonreía- esa espada era de ella… “que enternecedor” y al menos dime… ¿te toco como yo lo hice? Con esa pasión… -mojaba la punta de sus dedos mientras le mostraba los colmillos- seguro que no fue así…

-          Te detesto desde hace mucho tiempo… tu presencia en mi vida no ha sido nada Schreiker… la diferencia entre tú y yo es que tú has pasado la vida buscándome y para mí no tú tienes ningún tipo de valor en mi existencia… eres simplemente un “vurdalak” más…

-          ¡Como te atreves! –lo miraba con odio- tu y yo somos iguales… ¡yo te cree!

-          No somos iguales Audy –lo apuntaba con la espada- no me puedes comparar contigo siquiera… 

-          No me importa lo que pienses… vendrás conmigo y esta vez te retendré a mi lado por toda la eternidad… no me importa si tengo que beber casi toda tu sangre las noches… no me importa si te tengo que encerrar, amarrar, encadenar… desangrar… hare lo que tenga que hacer… porque no necesito la luz del sol para sentir calor… mientras te tenga a mi lado…

-          Que torcido y enfermo estas… -lo miraba con frialdad el cazador-

-          Tus amigos morirán… todo lo que tu amas yo me encargare de terminarlo… no te quedara mas que mi presencia en tu existencia…  me terminaras amando como yo a ti –sonreía mientras se mordía los labios mostrando su propia sangre caer hasta su garganta- ¿lo sientes no? si es cierto que te has estado alimentando de animales seguramente tienes una sed… junto a mi tu brillarías mas… -extendía su mano- te protegería de todo, no necesitas esta camada de perros a tu lado, no perteneces aquí… te pones en peligro tu y a ellos si en realidad eres “un cazador aun muy humano” deberías de pensar en eso y venir conmigo…

-          Jamás pasara eso…

-          Que lastima… -Audy apretaba con odio los dientes mientras clavaba su mirada en la de el- quería que vinieras por las buenas… pensaba que, podría convencerte pero ya me di cuenta que no… es una lástima…

-          Lástima es lo único que me inspiras tu… -lo decía determinante el cazador-

   Audy sentía a la par el golpe en su corazón tanto por las palabras de Kirk como los golpes que daba a su cuerpo. La espada hacia un corte en su pecho mientras trataba de recuperarse. Su vestimenta la mayoría de colores claros se teñía con su sangre.

-          Ya me canse de jugar… -Audy lo miraba fijamente-

-          Esto para mí no es un juego… por fin terminare contigo…

-          Entonces ven y ya no demores…

   Kirk miraba de reojo a los dos crinos, Orton llevaba la ventaja ante un Marco que lucia herido y cansado, en cambio Ancel y Pluma se median ambos, ahí la batalla estaba muy pareja.

-          Terminare contigo de una buena vez –pensaba- terminare con Kefren y así por fin podre descansar… mantendré la promesa que le hice a Nicole y por fin descansare… -empuñaba su espada con fuerza mientras se dirigía a Audy-

-          Que ganas tienes de eliminarme –pensaba- pero no… no te será tan fácil “cazador”

   Kirk se acercaba hábilmente hacia él, al final el había eliminado ya a bastantes vampiros desde las enseñanzas de su maestro “Omega” hasta el día que tomo su lugar. Pero este en especial conocía sus pensamientos, sus ataques y a pesar de eso había logrado herirle, para un vampiro “normal” hubiera sido suficiente para morir pero este no, este lo conocía muy a su pesar. Sentía la respiración del resto de la mana rodearlos. Era el momento de cortarle la cabeza y terminar con todo el dolor que desde muy joven le había dado. Dio un salto cuando sintió que la trayectoria de su espada se frenó de repente. Audy la tomaba con fuerza del filo mientras con un salto se colocaba justamente detrás de él, con la mano sobrante apretaba su garganta enterrando sus uñas en ella. No era la primera vez que Kirk sufría de un ataque así, sabía como contrarrestarlo pero esta vez era diferente. Sentía que sus fuerzas le abandonaban lentamente. Audy apretaba con más violencia sus uñas y como reacción una de sus manos intentaba liberarse pero era imposible. Poco a poco le quitaba parte de su esencia de vida al cazador.

-          Si tu hubieras… -hacía que soltara su espada y ahora era Audy quien la tomaba- estado conmigo esta clase de “trucos” yo te los hubiera enseñado… ¿Qué creáis? ¿Qué era un simple vampiro como los que habías acabado? –sonreía- no… te lo dije y te lo vuelvo a decir –se acercaba a su oído- témeme, ámame… solo hazlo y seré tu esclavo…

-          N..no… -lo decía débilmente-

-          Sera como tú quieras –tomaba con fuerza la espada y la enterraba en su estómago- esto créeme que…  no tenía que ser necesario…

   La visión de Kirk era cada vez más borrosa, las fuerzas lo abandonaban.

-          ¡Escúchenme bien! –Audy miraba a la manada rodearlo por completo mientras todos aullaban con furia-

   Marco Antonio era estrellado contra el duro asfalto, apenas pudo girar para evitar el ataque de Orton que miraba con furia a Audy.

   Jador aparecía en la oscuridad mientras toda la manada a su llegada aullaba.

-          Voy a ser claro y preciso… -Audy miraba a Jador- al menos contigo que aún no te trasformas puedo hablar… o le dices a tu “manada” que me deje ir con lo que me pertenece o aquí mismo le quito la vida… -lo miraba fijamente- y después tu manada puede terminar conmigo… ya no me importara nada… solo vine por el… y si no sale conmigo entonces es mejor terminar con todo…

   Marco Antonio lo miraba sorprendido mientras Ancel escuchaba la voz de Schreiker y solo sonreía.